Fue un taller relacionado con el cuerpo... lo que nos gusta de él, lo que nos disgusta, lo que nos duele... sirvió para conocernos a nosotros mismos un poquito mejor.
En la primera sesión tuvimos que hacer un "mini yo", coger una foto nuestra y hacernos ropa, fue divertido y nos dimos cuenta de los gustos de cada uno. ¡Me sentí como si volviera al colegio y en el recreo jugara a los recortables con mis amigas!
La segunda sesión me apreció aún más interesante, tuvimos que dibujar nuestro contorno en papel continuo y después con diferentes coles señalar lo que nos gusta de nosotros, lo que nos duele...
Y la última sesión fue la mejor de todas con diferencia. Tuvimos que llevar cada una una muñeca que nos "representara". La mía era morena (porque soy morena) y bueno esa muñeca creo que para mi es bastante importante porque fue la última muñeca me que regalaron, así que podría decirse que fue mi paso de la niñez a la adolescencia.
Cuando llegamos todas a la clase con nuestras muñecas ¡¡empezamos a jugar como unas enanas!!
Después de pasar un rato recordando viejos tiempo comenzamos a protegerla y a sentirla poderosa. Yo cubrí las aprtes de las que estoy operada (anginas, vegetaciones y ernia) y tooodas las dolencias, lesiones y partes que tengo que proteger por hacer ballet.
He de decir que creo que si que tienes algo de magia esta muñeca, porque desde que la hice me encuentro mucho y major, y hay una parte del cuerpo que no protegí de la que ahora estoy mal, así que en cuanto tenga un ratito la taparé y espero que se me quite.
No hay comentarios:
Publicar un comentario